miércoles, 8 de febrero de 2012

Sensaciones de novata

El insomnio y la danza no son una buena combinación. Y adivinen quien esta noche tampoco se puede dormir. Mañana tengo dos clases al hilo, primero contemporáneo y después clásico. Y me "despierto" en 2 horas. Otra noche sin dormir, vamos bien carancho!
Anteayer empecé en un nuevo instituto que es re groso. Llego al lugar en cuestión. Muchas aulas enormes, pasillos, escaleras y gente vestida de danza. Oh que placer, estoy en mi salsa. "115", acá es. Por si quedaban dudas, varias pibas sentadas en la puerta elongando, esperando a la profesora. Nadie se habla con nadie. No puedo evitar analizarlas y tratar de adivinar que tan buen nivel tienen. Se ven tranquilas, supongo que debo ser una de las pocas novatas. Llega la profesora, saluda. Parece que todas la conocen. Va a buscar la llave del candado que asegura la puerta y vuelve. "Vamos pasando" nos dice en tono amable. Que suerte que es amable, será exigente? Como desearía haber empezado a los 8 años con profesoras hiper exigentes que me hagan elongar a full y me enseñen minuciosamente cada detalle técnico de los pasos. Se empiezan a parar todas las aspirantes a bailarinas. Me levanto obedientemente y en un acto de gran torpeza estiro mi pierna justo cuando la profesora pasa por ahí, haciendo un efecto "traba". Inevitablemente, la mina trastabilla y casi se cae. "Uy perdón perdón" fue lo único que me salio decirle. Tan genia fue que se dio vuelta y me sonrió. Ya tengo mi dosis de vergüenza cubierta por el día de hoy. Yo que me las daba de delicada con mi mallita cruzada atrás y mis zapatillitas de cuero. En fin. A decir verdad, creo que me muevo mucho innecesariamente. Cuando me grabo para ver algún paso, descubro que mientras espero los tiempos de la música quiebro las manos, mis brazos de mueven como molinos de viento, me encorbo y no puedo dejar de moverme como si me estuviera meando. Debo ser una piba muy ansiosa. Loquilla, controlá tus movimientos, es un gasto de energía al pedo cuando podrías estar relajada y quietecita. El año pasado en el examen de fin de año, mientras esperábamos que se complete la mesa de profesores, estaba repasando mentalmente la secuencia de giros y me movia pa todos lados, y no me daba cuenta. Mi profe que estaba ahi me dijo "Quedate un poco quieta" jajajaj, para que vean que es cierto. Hay que empezar a tomar conciencia del cuerpo en general y no sólo cuando bailamos, porque por lo que se, le pasa a muchas personas. Nunca te dijeron, "dejá de hacer así con la pierna" o "cerrá la boca que te van a entrar moscas"?.
Como te contaba, entramos al aula. Wow, se respira arte, que genial. "Pongan las barras" pidió la mina con su voz amorosa. Al toque las aplicadas de la clase empezaron a correr barras móviles que estaban acumuladas contra la pared, de las cuales ni me había percatado por mi falta de experiencia  en salas grandes. "Las que recién empiezan se intercalan con las que están de antes". Buenísimo, me acomodo por acá. Tengo mi botellita de agua en la mano y nadie mas tiene una. Creo que la voy a dejar a un costadete para que no moleste. Empieza a marcar unas cosas, con unos nombres en francés que no entiendo ni jota (expresión mas vieja que la escarapela) pero es masomenos lo que hacía en el otro instituto. Menos mal que tengo algo de experiencia en esto. Descubro que el palo de las barras no esta atornillado a los soportes y se mueve, además parece carcomido por la humedad, se dobla y amaga de romperse. Pero qué demonios. A nadie parece importarle. Ey, concentración! profesionalismo, mente de bailarina, no cuelgues en detalles. Es un poco más difícil pero con un poco más de onda y equilibrio se puede usar. A medida que va avanzando la clase me doy cuenta que de principiantes tiene sólo el nombre. Whatever, calculo que con el tiempo nos irá explicando detalles técnicos. Al menos nos enseñó como hacer un buen jeté. Casi puedo sentir las risas del otro lado. Si loco, el jeté. (Y para los que no saben, le cuento brevemente que se empieza en plié, primero sale estirada una pierna y recién después saltas, caés en plié con la pierna que estiraste y la otra queda flexionada y suspendida, ok?). Y terminé la clase con la espalda resbalosa, empapada de cansancio, y una sensación de satisfacción mezclada con incertidumbre de no saber si la clase es para mi. La noche anterior tampoco había dormido una goma por los nervios. Llegué y me heché una siestita breve para poder dormir la noche siguiente. Todo fue joya hasta que a la noche me empezaron a doler las piernas sarpadamente y casi no podía moverme, me duró toda la noche, todo hoy, y con estas piernas mañana voy a danzar. Me empiezo a sentir una bailarina de ley.

2 comentarios:

  1. . Al menos nos enseñó como hacer un buen jeté. Casi puedo sentir las risas del otro lado. Si loco, el jeté. (Y para los que no saben, le cuento brevemente que se empieza en plié, primero sale estirada una pierna y recién después saltas, caés en plié con la pierna que estiraste y la otra queda flexionada y suspendida, ok?)

    ese es el salto de fama que nunca aprendí?
    amo tu blog, quiero que lo sepas

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  2. Ese era un grand jeté, y si lo aprendiste! También es genial leerte a vos :)

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